El Seprona ha confirmado que el pozo en el que cayó el pequeño Julen en el municipio malagueño de Totalán era ilegal y que las medidas de seguridad que rodeaban al mismo, eran nulas. Así se desprende del informe al que ha tenido acceso el ‘Diario Sur’ y ‘Espejo Público’ y que confirma que la Guardia Civil emprendió dos investigaciones en paralelo mientras se desplegó el dispositivo de rescate: uno sobre la caída del niño y otro sobre la legalidad del pozo y las obras.
El Servicio de Protección de la Naturaleza que abordó la investigación sobre la legalidad de la perforación y del movimiento de tierras realizado en la parcela, concluye que ambas cosas se hicieron sin licencia, por lo que «consideraría responsables de las infracciones urbanísticas detectadas tanto al promotor-dueño de la parcela- como al contratista».
Los agentes del Seprona han remitido sus conclusiones a la jueza que instruye el caso y mientras continúa abierta la investigación, en el programa de ‘Espejo Público’ han hablado con el maquinista de la excavadora que hizo los trabajos en la finca del familiar de Julen donde se produjo la tragedia.
En la entrevista ha reconocido que se muestra preocupado, pero quede momento no habla, porque es lo que le han recomendado «ya llegará lo que tenga que llegar». Del mismo modo, al ser preguntado acerca de si sabía si el pozo estaba tapado o no en el momento en que llevó a cabo las obras, ha reiterado su disposición a guardar silencio.
?VÍDEO| El maquinista que hizo trabajos en la finca del familiar de Julen se muestra preocupado «Ya llegará lo que tenga que llegar». Hemos hablado con él en #EXCLUSIVA, esto es lo que nos ha contado ⤵ ▶https://t.co/897gn9dxri pic.twitter.com/8Wy5StSxED
— Espejo Público (@EspejoPublico) 31 de enero de 2019