Agentes de la Policía Nacional han detenido en Valladolid a un hombre con más de 40.600 archivos de carácter pedófilo de extrema dureza y han constatado que presumía en Internet de mantener relaciones sexuales con su hija menor de edad, sin que realmente se llegaran a producir esos hechos.
Según informó la Policía Nacional, el arrestado utilizaba una red privada de intercambio de archivos a la que sólo se podía acceder a través de una invitación previa, y recurría a la vulneración de redes WiFi de sus vecinos para realizar conexiones de un modo seguro y garantizar su anonimato.
La investigación comenzó a finales del año 2015, cuando, a través de Interpol, la Policía Nacional recibió una comunicación procedente de la Policía suiza en la que se indicaba que habían detectado a un usuario, ubicado en España, con multitud de archivos de explotación sexual infantil a disposición de sus contactos en Internet.
Tras la investigación inicial, desarrollada con la información recibida de Suiza, los agentes no lograron definir su localización exacta debido a las fuertes medidas de seguridad que adoptaba.
Detenido un hombre en #Valladolid con más de 40.600 archivos de carácter pedófilo de extrema dureza.
Más info⤵️https://t.co/4jStfMerae pic.twitter.com/seeH25yXyw— Policía Nacional (@policia) 30 de enero de 2019
Meses después, y también vía Interpol, la Policía alemana emitió una nueva comunicación sobre el que en un principio parecía ser otro usuario de esta misma red, también ubicado en España y que igualmente contaba con una ingente cantidad de archivos ilegales que ofrecía a modo de intercambio a sus contactos.
Toda la información con la que se contaba hasta el momento fue analizada utilizando un software específico, que permitió identificar las conexiones que realizan los usuarios que distribuyen archivos de pornografía infantil a través de esta red. Al consultar el historial de las conexiones realizadas, los investigadores comprobaron que desde las direcciones IP utilizadas por él también se había accedido a las cuentas del primer usuario que estaba siendo investigado desde el año 2015.
De esta manera se determinó que se trataba del mismo objetivo, además de identificar otras tres cuentas de las que hacía uso con el mismo fin de realizar intercambios de material audiovisual con pedófilos de todo el mundo.
HACKEABA A SUS VECINOS
Igualmente, se pudo verificar que el detenido recurría al uso de aplicaciones específicas y ‘malware’ para descifrar las contraseñas de seguridad de las redes WiFi de sus vecinos. De esta forma realizaba las conexiones de un modo más seguro y garantizaba su total anonimato, dificultando así la labor policial al no poder centrar con exactitud su ubicación.
También los agentes tuvieron conocimiento de la gran cantidad de comentarios que publicaba, presumiendo acerca del amor prohibido que vivía con su hija menor y en los que también compartía consejos con otros hombres acerca de cómo tratar a las niñas e iniciarlas en el amor paterno-filial.
Con toda esta información los agentes lograron averiguar la localización exacta del investigado en Valladolid y procedieron a su detención. Tras la entrada y registro de su domicilio se intervino un disco duro en el que se almacenaban 40.646 archivos de material de explotación sexual infantil de extrema dureza, además de su teléfono móvil, desde el que accedía a los foros en los que efectuaba la publicación de los comentarios de incesto.
Finalmente, los investigadores pudieron comprobar que los abusos sexuales a su hija menor relatados en los foros no se habían llegado a producir.
(SERVIMEDIA)