La Guardia Civil denunciará a los responsables de la construcción del pozo ilegal en el que el pequeño Julen perdió su vida en Totalán (Málaga), y también a los que ejecutaron las obras posteriores que habrían movido la piedra que tapaba el agujero.
Según ‘El Mundo‘, que cita fuentes de la Benemérita, «trasladará un informe con los trabajos ilegales que allí se realizaron a los organismos públicos competentes para que fijen las sanciones administrativas correspondientes».
El director de la Guardia Civil ha confirmado que lo más seguro es que se les acuse de «homicidio imprudente», aunque la confirmación llegará cuando se conozcan los resultados de la investigación.
En las próximas horas se llamará a declarar a varias personas, entre ellos al novio de una prima del padre de Julen, de quien era la finca, y sobre el que podrían derivar actuaciones judiciales. Lo mismo ocurrirá con el pocero.
De momento, la magistrada estudia las imágenes grabadas por la Guardia Civil, con el recorrido que pudo realizar el pequeño Julen, antes de caer al minúsculo pozo, aunque falta por determinar cuál fue el punto de origen. La principal hipótesis del tapón de tierra es que se formó con la caída del niño.
El Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga ha ordenado el «aseguramiento» de los pozos de este trágico caso con la colocación de una plancha de 600 kilos. El objetivo es «evitar accidentes de personas que por curiosidad o por otros motivos se acerquen al lugar, se pretende preservar las pruebas que pudiera requerir la jueza».