Este martes entra en vigor el Real Decreto 1181/2018 relativo a la indicación del origen de la leche utilizada como ingrediente en el etiquetado de leche y productos lácteos, una demanda de la “mayoría” de los consumidores españoles, según defendió este lunes la Organización Interprofesional Láctea (Inlac), que espera que la nueva legislación contribuya a aumentar el consumo de referencias de origen nacional.
Así lo manifestó a través de un comunicado en el que valoró “positivamente” que los ciudadanos puedan ver en el etiquetado tanto el país de origen en el que la leche ha sido ordeñada como el país donde ha sido transformada, ya que, con ello, “se facilita el derecho a la elección de compra de los consumidores españoles y se avanza en transparencia”.
En este sentido, recordó que a partir de ahora será obligatoria la indicación en el etiquetado del origen de la leche utilizada como ingrediente en un porcentaje superior al 50%, expresado en peso, respecto al total de ingredientes usados.
El lugar de ordeño y el lugar de transformación se indicarán mediante referencia a un ‘Estado miembro’ o ‘terceros países’; ‘UE’, ‘fuera de la UE’ o ‘UE y fuera de la UE’ o ‘España’, siempre que el país de ordeño o de transformación sea exclusivamente España, no pudiendo sustituirse por la expresión ‘UE’.
Tanto si el etiquetado incluye la lista de ingredientes como si solo incluye la denominación del alimento, el origen aparecerá «cerca» y tendrá caracteres del mismo tamaño y color de fuente que estas referencias.
Segun Inlac, los operadores de empresas alimentarias tendrán, a partir de ahora, la posibilidad de añadir también información “más precisa” del lugar de procedencia de la leche, si ésta procede enteramente del origen indicado, mediante la indicación del nombre de una región o territorio.
El organismo subrayó que la norma, que regulará este aspecto durante los próximos dos años, también afecta al yogur, la nata, los lactosueros, la mantequilla, los quesos o el requesón.
Para Inlac se trata de una medida «muy esperada» por el sector, puesto que ofrecerá información «relevante» al consumidor, que «ganará en tranquilidad sobre el origen del producto que está adquiriendo».
«Conocer el origen de la leche es percibido como un atributo positivo asociado a su calidad”, según la organización, para la que esta medida también tendrá «ventajas» para los productores e industria porque una mejor indicación de procedencia «podría potenciar las ventas”.
En este punto, explicó cómo, «con relativa frecuencia», el consumidor español «prefiere adquirir leche de origen nacional pero hasta ahora no podía hacerlo porque esa información no figuraba en el etiquetado de leche, yogur o quesos, por ejemplo”.
Por otra parte, tal y como establece el Real Decreto en su disposición transitoria primera sobre comercialización de existencias de productos, la organización agregó que se podrán comercializar los productos fabricados antes de la entrada en vigor de este real decreto “que satisfagan las disposiciones aplicables en dicho momento, hasta que se agoten sus existencias”.