4Mételes papel de periódico
Otra opción que tenemos si queremos evitar la aparición de las tortuosas rozaduras, pasa por untar bien los zapatos por dentro con crema hidratante, y después llenarlos con bolas de papel humedecidas. Una vez que el zapato esté bien relleno de bolas de papel, tendremos que dejarlos así durante un par de días.
De esta manera, conseguiremos que vayan cediendo poco a poco, y cuando nos los pongamos lo más seguro es que ya no nos aprieten ni nos hagan heridas.