Una rara especie de langosta se ha salvado de la olla gracias a una mutación que la hace única. Solo se encuentra un especimen así por cada 30 millones de langostas.
El propietario de Ocean City Seafood, un restaurante de Silver Spring, en Maryland, Estados Unidos, notó algo extraño cuando le sirvieron su pedido habitual de langostas pescadas en la costa de Maine. De entre todos los crustáceos, uno destacaba de sobremanera debido a su color amarillento y manchas negras.
El dueño se puso en contacto con el Acuario Nacional de Baltimore donde le aseguraron que el espécimen era único y para el que preparan ahora su traslado al Acuario de Georgia. «Todavía estamos en las etapas iniciales de planificación para cuidar la langosta en el acuario», aseguró la portavoz del acuario, Paige Hale, al ‘Baltimore Sun‘.
Por su parte, desde el restaurante declararon que su objetivo es asegurar que el animal encuentre un entorno saludable donde poder vivir tranquila el resto de sus días.