El personaje estrella de Nintendo, Super Mario, inaugura este 2019 que promete ser importante para Switch con la reedición de Super Mario Bros. U para Switch que ahora toma el sufijo Deluxe. Nintendo vuelve a la línea de traer hasta su consola híbrida aquellos títulos imprescindibles del catálogo de Wii U y con Super Mario Bros. U Deluxe no se han equivocado.
Super Mario Bros. U Deluxe es un plataformas 2D al más puro estilo de la saga y ya en su día fue una de las mejores entregas, incorporando todo lo mejor de los anteriores juegos. Volvemos a una serie de mundos en los que ir completando niveles y avanzando a otras casillas pudiendo elegir a veces el camino por donde llegar. En cada mundo habrá un jefe intermedio en un castillito y un jefe final. Los jefes finales son los hijos de Bowser, que por supuesto ha hecho de las suyas para secuestrar a la princesa y expulsar a nuestros héroes.
Y leéis bien, nuestros héroes porque Super Mario Bros. U Deluxe nos da la opción de elegir entre Mario, Luigi y Toad en modo normal, cada uno con sus físicas diferentes y sus ventajas y desventajas, por ejemplo Luigi salta más y puede patalear en el aire. También podremos elegir a Toadette, que supondrá poner el juego en el modo fácil con algunas ventajas como el contador de segundos a 100 más que en el modo normal o la recolección de vidas multiplicada por 3. El último personaje seleccionable es Caco Gazapo, que pondrá el juego en súper fácil, es decir, ni siquiera los enemigos nos podrán dañar. Esta novedad de selección en el modo de un jugador de varios personajes es nueva en esta edición y se agradece. Además siempre podemos jugar con hasta 4 amigos en la misma consola con lo que la diversión se puede multiplicar y se hace accesible para toda la familia.
Además de la aventura principal de Super Mario Bros. U está añadido el Super Luigi Bros. U, que era un contenido añadido del juego original y que hace de la aventura algo más complicado con un ritmo frenético, mayor dificultad con tiempo reducido para terminar las fases y cambios en las físicas del personaje que hace más complicado el control de Luigi. Un reto para los más expertos sin duda que hacen que la aventura se alargue.
Por si las dos aventuras y los 164 niveles entre las dos no fueran suficientes, Super Mario Bros. U Deluxe añade también más modos de juego: En el modo Desafíos deberemos superar, como su propio nombre indica, una serie de retos de más fácil a más complicado. Otro modo es Partida Turbo donde la velocidad de desplazamiento de pantalla irá en aumento a medida que vayamos recogiendo monedas, el objetivo será terminar las fases rápido para detener el reloj en el menor tiempo posible. Este modo es bastante competitivo para varios amigos. Para terminar también tenemos el modo Caza de Monedas, donde tendremos que competir contra nuestros amigos en multijugador local para recoger más monedas y poder ganar.
Nintendo no se ha olvidado de añadir un editor en el que podremos modificar las monedas de unas cuantas pantallas para conseguirlas, y esto es algo que en los últimos Super Mario gusta bastante, el coleccionismo y el conseguir las 3 monedas grandes en cada pantalla, por eso el mismo juego tiene una parte de visionado donde nos enseñarán a jugar, a realizar trucos avanzados e incluso a desvelar en qué parte de los escenarios están las monedas más complicadas de conseguir.
Gráficamente el juego luce espectacular, tanto en modo dock como en modo portátil consiguiendo en la pantalla grande hasta 1080p lo que hace que los colores, la nitidez y la fluidez resalte. En modo portátil se reduce la resolución a 720p pero a 60 frames por segundo que garantizan la misma fluidez y nitidez que en la otra forma. Sin duda el juego entra por la vista y en eso Nintendo es un experto. En cuanto al sonido, como cada juego de la marca nipona, es algo de lo mejor tanto la banda sonora con los personajes incluso bailando al ritmo de la música como los efectos. Esencia Nintendo que entra por ojos y oídos.
Super Mario Bros. U Deluxe es el rey de las plataformas y a pesar de ser una reedición de un juego de hace 6 años, es imprescindible tanto para los amantes del género, como para los que no lo pudieron jugar o si pudieron y ahora lo quieren portátil. El nivel de detallismo y cariño que se observa en el juego hacen de él una gran obra, al nivel de los mejores de la saga y una recomendación sin duda para todos los poseedores de Switch.