La ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal ya tiene nuevo puesto de trabajo, tras dejar su escaño al desvelarse las conversaciones grabadas por el excomisario José Manuel Villarejo.
Según informa ‘Servimedia’, ha sido destinada a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo después de haber solicitado su reingreso en la Abogacía del Estado.
Cospedal ejerció como abogada del Estado entre 1991 y 1996 y renunció a su escaño de diputada el pasado mes de noviembre tras el escándalo de las escuchas realizadas por Villarejo. Anteriormente había dejado su puesto en el Comité Ejecutivo del PP tras su derrota en las primarias que alzaron a Pablo Casado como presidente del partido.
En ese momento la exdirigente popular emitió un comunicado en el que afirmaba que su único interés al entrar en política fue servir a su país “a través de unas siglas, las del PP”, y que ni un solo día consideró la política “como un trabajo más”. “Estar por estar, a cualquier precio, no tiene sentido”, indicó.
Según desveló Moncloa.com, el entorno de Cospedal habría encargado a Villarejo que espiara al hermano de Alfredo Pérez Rubalcaba cuando éste era ministro del Interior. Lo hizo después de que el policía encarcelado presentara a Alejandro Rubalcaba como «el punto débil» del dirigente socialista. Esas conversaciones también desvelaban el espionaje al dirigente del PP Javier Arenas.
La investigación en torno a Rubalcaba fue uno de los temas abordados en la reunión que la entonces secretaria general del PP y su marido, Ignacio López del Hierro, mantuvieron con Villarejo el 21 de julio de 2009 en la sede central del Partido Popular.
Las grabaciones revelaban que, en un encuentro final, López del Hierro encargaba a Villarejo que investiga al hermano. El comisario sugiere rastrear teléfonos ilegalmente y hacer un repaso de las tarjetas de crédito. El policía acepta la encomienda, aunque reconoce que es difícil.
En su despedida, Cospedal aseguraba que luchó contra los que traicionaron a su partido y que “ha sido un trabajo ingrato y difícil, pero no me he arrepentido nunca”. “Nunca he tenido que mentir, nunca lo he hecho. Siempre he dicho la verdad. Y la verdad es que nunca ordené ni encargué espiar a nadie”, indicó.
Cospedal vuelve ahora al Alto Tribunal retomando su carrera como abogada del Estado, que inició como asistente jurídica en el País Vasco y después en el Servicio Jurídico del Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente. También fue asesora del Gabinete del ministro de Trabajo y Asuntos Sociales Javier Arenas (PP) en 1996.