La portavoz de Unidos Podemos en el Congreso de los Diputados, Irene Montero, se estrenó este miércoles como líder de facto del partido por la baja paternal de tres meses de Pablo Iglesias arengando a las mujeres a votar y salir a la calle para «ganar la batalla» a los «trillizos reaccionarios» y «odiadores profesionales», como caracterizó al PP, Ciudadanos y Vox.
En una vibrante intervención de media hora de duración con motivo de un encuentro de mujeres llamado ‘La vida en el centro’ y celebrado en Matadero Madrid, Montero regresó a la actividad política después de sus seis meses de baja maternal con un discurso en el que partió de que “lo primero que han atacado” esos tres partidos en su pacto en Andalucía ha sido a las mujeres (aunque esta demanda de Vox no se ha incluido al final en el acuerdo).
La portavoz de Podemos lo atribuyó a que 2019 ha sido el año en que las mujeres han dicho con claridad que van a «participar en política». En esa línea, se dirigió en dos momentos a las andaluzas para decirlas que está con ellas y las cree», desatando en el segundo de ellos el coro de «Sí te creo» por parte de las espectadoras.
Montero también se refirió a «la gente normal» para pedirle que participe en política porque «la gran victoria de los poderosos es cuando consiguen hacer creer que la política es cosa de otros. En este sentido, pidió que transformen el miedo en esperanza luchando contra esos poderosos y no contra los inmigrantes y criticó que PP, Ciudadanos y Vox también «incendian la política para que perdamos el interés en ella». Pero la dirigente podemista fue focalizando gradualmente la arenga en la mitad femenina.
Las mujeres tenemos que salir a votar», sostuvo en contraposición a que «dicen que no politicemos el tema del feminismo”. Según planteó, si las mujeres intervienen en política habrá leyes para tener mejores escuelas y hospitales, dado que ellas son las que tienen que encargarse mayoritariamente de suplir las deficiencias de los servicios sociales. «Eso son leyes, para eso hay que participar en política».
«Si nos unimos, tenemos el poder de cambiarlo todo», aseguró. «La fuerza de las mujeres es la más poderosa que existe para hacer frente a los trillizos». Poco después insistió en esa doble línea con frases como «las mujeres sabemos mejor que nadie lo que significa la derechización» y «la revolución de las mujeres es el arma más poderosa para hacer frente a los trillizos reaccionarios y para construir un país mejor».
«Viene un año muy difícil y hay que llenar las calles y hay que llenar las urnas. Ni una sola mujer puede quedarse en casa este 2019 para ganar la batalla a estos reaccionarios», arengó, diagnosticando que en este «año de encrucijada» puede haber «una respuesta de odio al diferente si no nos movilizamos y nos creemos que la política no va con nosotros pero también puede haber una respuesta de esperanza» si las mujeres son «punta de lanza». Por eso, reivindicó «una España feminista” y terminó: «Si nosotras nos movemos, todo puede cambiar».