La líder de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, señaló este lunes por primera vez como un error en su campaña electoral el haber dado la impresión de que, si el PSOE no tenía los votos suficientes, “como siempre le daríamos el voto para evitar que las derechas gobernaran”.
Lo hizo en una entrevista en la Cadena Ser recogida por Servimedia en la que, aun sin concretar más de lo hecho hasta ahora sobre los “motivos diferentes e incluso contradictorios” que llevaron a Adelante Andalucía a perder 300.000 votos sobre la suma de Podemos e IU en las autonómicas de 2015, sí reconoció que esa disposición tácita a volver a investir a Susana Díaz “ha hecho que nuestros votantes se desmovilizaran”.
Rodríguez, que durante la campaña dejó claro que Adelante Andalucía no permitiría gobernar a la derecha ni entraría en el hipotético Ejecutivo de Díaz, pero no negó que fuera a permitir con sus votos la investidura de la hasta ahora presidenta de la Junta, deslizó que “la previsión de que, como siempre, iba a ganar el PSOE, y, si no tenía los votos suficientes, como siempre le daríamos el voto para evitar que las derechas gobernaran”, ha “hecho que nuestros votantes se desmovilizaran”, pues se instaló la “necesidad de sacar a un Gobierno agotado liderado por una presidenta agotada”.
Según la secretaria general de Podemos en la comunidad, aunque su candidatura sí consiguió atraer “cierto voto socialista”, muchos de sus votantes de 2015 “se han quedado en casa” por esta impresión de que sus diputados investirían a Díaz y, además, en Adelante Andalucía no han “sido capaces” de proyectarse como “un gobierno alternativo”. Por ello, se conjuró para dar a partir de ahora “un discurso más solvente, más riguroso, no necesariamente más institucional” sino que sea compatible con “alimentar ese sentido común alternativo” que nació el 15-M y que ahora parece sufrir “un cierre del ciclo de movilización” que se gestó en Sol.
Rodríguez adaptó así su interpretación del resultado electoral a algunas encuestas publicadas que atribuyen éste a la situación interna de Andalucía y la mala gestión del Gobierno socialista, pero mantuvo como otra de las razones de la bajada de su candidatura el que 2018 haya sido “el año en que la cuestión social pasó a segundo plano” y “la preocupación cotidiana de los españoles parece ser la crisis territorial y el conflicto catalán”.
ENFOQUE REGIONAL
Adelante Andalucía basó precisamente su campaña en un enfoque regional y la confianza en que el conflicto nacionalista del que hablaban constantemente el PP y Ciudadanos no pesara en el voto de los electores.
En la Cadena Ser, Rodríguez insistió en declararse “convencida” de que el presentarse conjuntamente Podemos e IU en la confluencia Adelante Andalucía, que también integró a Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza, no ha perjudicado electoralmente. “No hay ningún voto que apunte a quela confluencia ha sido un elemento de restar voto”, aseguró.
La ya diputada electa del Parlamento andaluz recordó la limitación de dos mandatos que prevé el Código Ético de Podemos para eludir las preguntas sobre si dimitiría de la dirección, apelando a que hay que “esperar a que se acabe el ciclo electoral completo” y a que “uno no se va corriendo”, sino que “hay que buscar un relevo” y preparar la situación posterior, y también se reafirmó en su decisión de no aceptar los votos que le ofreció Ciudadanos para que Adelante Andalucía entrara en la Mesa de la cámara. Según justificó, si lo hubiera hecho no habría cambiado la correlación de fuerzas en el Pleno y su grupo no habría podido criticar el “acuerdo a tres” con el PP y Vox que Ciudadanos habría querido estar “disimulando” con esa oferta.
Adelante Andalucía ya ha anunciado su intención de recurrir a los tribunales su exclusión de la Mesa del Parlamento, aunque Rodríguez aseguró que primero intentará “solucionarlo por la vía reglamentaria y política”. En cuanto a la sentencia del Tribunal Constitucional del año pasado que anteponía los procedimientos de designación de la Mesa a la representación de todas las fuerzas que han logrado diputados, ella confía en que, al tratarse de una respuesta a un recurso de amparo, no siente jurisprudencia y no prevalezca sobre la “necesaria pluralidad” en el órgano rector de la Cámara.
(SERVIMEDIA)
