El recibo de la electricidad de un consumidor medio alcanzó en diciembre los 69,27 euros, lo que supone un leve descenso del 0,6% con respecto al mismo periodo del año anterior, cuando costó 69,66 euros.
Según el simulador de la factura de la electricidad de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), con respecto a noviembre el recibo sube un 0,6%, puesto que el mes pasado alcanzó los 68,86 euros en este periodo.
De esta manera, en términos mensuales en diciembre se rompe la tendencia a la baja iniciada en octubre, que terminó con una caída diaria de alrededor del 3,5%, rompiendo con la fuerte tendencia alcista experimentada por la electricidad desde mayo.
En cuanto a la evolución del coste de la electricidad con respecto al año pasado, en diciembre vuelve a bajar tras las subidas registradas desde mayo, pese a que en los inicios de 2018 el recibo se había mantenido en un precio similar o más barato que el año pasado.
Ante esta situación, el Ministerio de Transición Ecológica decidió en octubre suspender la aplicación del impuesto del 7% a la generación eléctrica, medida que también convalidó el Congreso de los Diputados.
Dicha evolución del precio de la luz se corresponde con la factura de un consumidor medio con una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW) y una demanda anual de 3.900 kilovatios hora (kWh).
Estas oscilaciones en el precio de la electricidad se producen básicamente por las variaciones en el coste de producción, que se incrementa cuando hay poca aportación de fuentes de generación renovable como el agua y el viento y mucha de fuentes fósiles más caras, especialmente el gas.