El Tribunal de Cuentas ha condenado a la exalcaldesa de Madrid Ana Botella y a otros siete exaltos cargos de su Gobierno a pagar 25,7 millones de euros por vender 1.860 viviendas públicas a dos sociedades del ‘fondo buitr’e Blackstone a precios que estaban por debajo de los de mercado. Botella ha anunciado a través de un portavoz que piensa recurrir esta decisión.
Los ocho condenados tienen intención de presentar recurso porque “no comparten” la interpretación que hace el tribunal sobre el proceso de venta en el que, como responsables políticos, no intervinieron “ni directa ni indirectamente” en los detalles de la operación de venta.
Según el Tribunal de Cuentas, todos ellos «incurrieron en una negligencia grave» al no impedir “el perjuicio en el patrimonio público» cuando tomaron la decisión de vender inmuebles de titularidad municipal a un ‘fondo buitre’ por 128,5 millones de euros, que podrían haber alcanzado los 151 millones si se hubieran aplicados precios de mercado en el momento de la venta.
Los condenados, además de la exalcaldesa, son el exconsejero delegado de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo de Madrid, Fermín Oslé; la ‘número dos’ de Ejecutivo municipal, Concepción Dancausa, y los concejales José Enrique Núñez Guijarro, Diego Sanjuanbenito Bonal, María de la Paz González García, Dolores Navarro Ruis y Pedro María Corral Corral.