Un hombre de 29 años de edad, agredió a dos mujeres en Sanxenxo, en Galicia, en la madrugada de Navidad y se mofó ante ellas y un grupo de amigas de la poca repercusión que podrían tener sus actos, con frases como «si a los de la Manada no les pasó nada, a mí por pegaros unas hostias a vosotras menos»; o «mañana estaré en casa como si nada».
Según informa ‘La Voz de Galicia’, el agresor les increpó mientras iban con un grupo de amigas por el puerto deportivo de Sanxenxo, una zona de marcha y repleta de gente, «apestáis a sangre de regla, (…) putas», ante lo cual, una de ellas respondió «¿estás de coña? Vete», provocando una reacción violenta en el individuo «me dio una bofetada con toda la fuerza».
Tras recibir el golpe, la chica perdió el equilibrio y tuvieron que sujetarla para que no cayera el suelo. En ese momento, el agresor salió corriendo y «las amigas de la agredida le persiguieron. Querían tener fotos de él y que no le saliese gratis la algarada». Cuando llegaron a su altura y le pidieron cuentas por la agresión, el hombre volvió a responder con violencia contra una de ellas: «le dije simplemente que se pirara y ya no recuerdo más que un golpe y verme tirada en el suelo. Me dio con toda la fuerza y además me lastimé al caer, tengo un costado todo rascado. Y también me golpeé la cabeza».
Al parecer, tanto las chicas, como el presunto agresor han interpuestos sendas denuncias con distintas versiones y la Guardia Civil ha iniciado una investigación para aclarar los hechos. Según las fuentes citadas por el diario hay «datos contradictorios», desde la subdelegación de Gobierno se habla de un «altercado» y de que la investigación está en trámite.
Tras la agresión, las dos agredidas fueron al centro sanitario para ser atendidas y criticaron la mala atención recibida «a mí, como tenía un costado rascado y tenía síntomas de que me había pasado algo, pues más o menos me atendieron sin problema. Pero a mi amiga, que le dio en la cara y tenía la marca de la mano, la médica le preguntó que a qué iba allí, que no tenía nada». De hecho, la otra mujer contó la frustración que sintió y que le hizo romper en lágrimas «no lloré cuando me pegó, no lloré cuando todo el mundo estaba a mi alrededor y sin embargo me entró un llanto terrible en el PAC, cuando la médica me dijo que no me veía nada, que qué hacía allí. Dijo que no me veía las marcas, pero esas mismas marcas sí me las vio después la Guardia Civil cuando fui a denunciar y me las vieron en el médico al día siguiente».