Lo ocurrido en la media maratón de Shenzhen ha sonrrojado a los organizadores del evento, y es que gracias a una cámara aérea se ha comprobado que 258 corredores hicieron trampas en la carrera.
Las cámaras vieron a 237 corredores que tomaron atajos, y después se pilló a otros 21 que corrieron con un dorsal falso. Esto podría acarrear sanciones de hasta dos años sin poder competir a los corredores que hicieron trampa.
Por parte de la organización se ha lanzado un comunicado pidiendo perdón por lo sucedido: «Lamentamos profundamente lo ocurrido durante el evento. Correr un maratón no es sólo hacer ejercicio, es una metáfora de vida, y cada corredor es responsable de sí mismo».