Ikea ha anunciado que va a suprimir 7.500 empleos en el plazo de dos años, lo que supone el 5% de la plantilla, en el marco de un proceso de transformación que ha aprobado el gigante sueco, y del que se espera que tenga un impacto mínimo en España.
La reestructuración, según ha explicado Ikea Group, que concentra el 90% de las ventas de IKEA, irá acompañada de la creación de 11.500 puestos de trabajo, que irá de la mano de la apertura de nuevas tiendas, inversiones en digitalización y una mayor capacidad.
El director de IKEA Suecia, Hakan Svedman, ha explicado que se va a «introducir una nueva organización, mejor adaptada para satisfacer a nuestros clientes. Para hacerlo posible necesitamos mejorar nuestra forma de trabajar, dirigir y organizarnos».
El consejero delegado de Ikea Group, Jesper Brodin, ha declarado a ‘Reuters’ que necesitan simplificar la forma de organización, sobre todo, en las oficinas centrales, porque «hemos invertido en recursos de muchas formas. Y para ser honestos, vemos que en varias partes de nuestra organización hemos duplicado el trabajo». Así ha asegurado que los despidos no están enfocados a las divisiones operativas o de distribución.
IKEA Group plans to cut 7,500 administrative jobs https://t.co/xJ5VSuxeuY pic.twitter.com/guKEuVi2B5
— Reuters Top News (@Reuters) 21 de noviembre de 2018