Un hotel en las Islas Maldivas se ha convertido en la primera residencia de lujo submarina tras construir dos plantas debajo del Océano Índico.
El alojamiento ‘Muraka’ cuenta con un gimnasio privado, un restaurante de cinco estrellas, una piscina que se funde con el mar y habitaciones a casi 5 metros de profundidad.
Pasar una noche en sus instalaciones cuesta la friolera de 50.000 dólares, algo más de 43.000 euros, e incluye un cocinero privado y un barco a su disposición.
Así son sus instalaciones: