Los vecinos de un bloque de la localidad catalana de Terrassa están viviendo una auténtica pesadilla por culpa de la alarma de una casa vacía que se disparó el pasado martes y que no hay manera de que deje de sonar.
Los inquilinos anexos a la vivienda donde está situada la alarma aseguran que se han puesto en contacto con el banco responsable de la vivienda y también con Securitas Direct, empresa encargada de la instalación del dispositivo, pero lo cierto es que la alarma continúa activada.
Una de las afectadas, según informa ‘La Vanguardia’, asegura que el banco admite que ha vendido la casa y que hasta dentro de 2 meses no se habitará. También ha contactado con Securitas Direct que afirma que ellos no pueden acceder a la vivienda hasta que no se lo pida el cliente.
Lo peor de todo es que la alarma está conectada a una batería que puede llegar a tener una autonomía de hasta año y medio.