Muchas mujeres son propensas a la retención de líquidos, una situación de lo más desagradable. Al malestar general se suman las piernas inflamadas, calambres o hipertensión.
La retención de líquidos se puede deber a una mala alimentación, al estrés o incluso a problemas con la circulación de nuestro organismo. Por eso, te damos una serie de consejos que puedes seguir para prevenir problemas de este tipo.
1Bebe gran cantidad de agua
Beber agua es una de las cosas más importantes a tener en cuenta cuando se trata de prevenir la retención de líquidos. Estar hidratado es fundamental, y más aún si lo que quieres es expulsar los líquidos ya retenidos. Por eso, se recomienda consumir al menos dos litros de agua al cabo del día, eso sí, tampoco hay que excederse…
Si eres de los que no suele beber muy a menudo, de los que sólo recurren al agua cuando tienen sed, lo ideal sería que tuvieses una botella de agua cerca de ti. Así, sin darte cuenta, beberás agua continuamente, y los dos litros se te quedarán cortos.