El presidente de la Asociación de Empresas de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc), Ignacio González, ha apostado por «extender la bajada del IVA» -implementada por el Gobierno y que caduca el 30 de junio- y aplicarla también a productos como la carne y el pescado, para devolver el poder adquisitivo a la gente ante la inflación.
Lo ha dicho este jueves en declaraciones a los periodistas al finalizar la Asamblea General de la Aecoc, celebrada este jueves en el Hotel Barceló Sants de Barcelona, y que ha contado con la participación del excomisario de economía de la Unión Europea, Joaquín Almunia.
González ha asegurado que extender la bajada del IVA a más alimentos es algo urgente, puesto que cree que «sería bueno para las clases más desfavorecidas».
También contempla como una medida necesaria ante la subida de precios del mercado deflactar el IRPF: «Puede parecer un esfuerzo muy grande por parte de las arcas del Estado, pero no lo es tanto porque el gran beneficiado de la inflación son precisamente los impuestos«, ha aclarado.
Ha previsto que la inflación en los productos alimentarios experimente una bajada «de una manera lenta pero sostenida» a partir de abril, pero ha avisado de que esto no significa que bajen los precios, sino que subirán menos.
Y ha apuntado que en 2024 los precios «llegarán a una situación cada vez más normal», con una inflación que calcula que oscile entre el 4% y el 4,5%.
González ha alertado de que la sequía en Catalunya «sin duda» va a afectar sobre los precios de algunas categorías de productos si no se revierte la situación climática en los próximos meses.
«Esperemos que el impacto de otras materias primas que están bajando sea superior y el conjunto de la cesta baje, pero es un problema, debería empezar a llover», ha dicho.
Por otra parte, ha pedido no «demonizar» a las empresas por obtener beneficios derivados de la inflación, defendiendo que es algo bueno para el mercado, puesto que genera crecimiento económico y empleo de calidad, en sus palabras.
En este sentido, ha abogado por trabajar para incrementar la productividad, bajar los costes empresariales, bajar el absentismo laboral y «dar una seguridad para que las empresas afronten el futuro con inversiones».