Madrid reclama a la Ministra Montero una financiación equilibrada y apropiada para su destacado compromiso social

La Comunidad de Madrid se ha posicionado como una de las regiones más solidarias de España, al mismo tiempo que busca una financiación justa y adecuada para poder prestar los mejores servicios públicos a sus ciudadanos.

Este ha sido el mensaje transmitido por el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García Martín, en respuesta a las declaraciones de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien acusó al Partido Popular de «practicar una política fiscal irresponsable».

García Martín ha manifestado su «sorpresa» ante estas declaraciones, destacando que Madrid es la comunidad que más recauda y que, a pesar de tener los impuestos más bajos de toda España, su política equilibrada les ha permitido ser la región más solidaria, aportando más del 70% de los fondos de las comunidades autónomas, que se utilizan para financiar los servicios públicos de todo el país.

La política fiscal de Madrid vs. la del Gobierno Central

El consejero madrileño ha criticado la política fiscal del Gobierno de Pedro Sánchez, a quien ha acusado de llevar a cabo una política fiscal confiscatoria, señalando que desde que el presidente del Gobierno llegó al poder, ha subido 69 veces los impuestos a los españoles, mientras que desde que Isabel Díaz Ayuso es presidenta de la Comunidad de Madrid, los ha bajado 25 ocasiones.

Según García Martín, esta diferencia se debe a que, mientras el Gobierno central aumenta la carga fiscal, en Madrid siguen bajando los impuestos, lo que dinamiza la economía, generando más empleo, empresas e inversiones, lo que a su vez se traduce en una mayor recaudación que se destina a la mejora de los servicios públicos.

El llamamiento a la ministra de Hacienda

El consejero ha instado a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, a que conozca y aplique este modelo de política fiscal equilibrada en el Gobierno de España, para que beneficie a todos los españoles, quienes, según García Martín, «no soportan más la presión fiscal a la que les está sometiendo el Gobierno de España, especialmente a las clases medias y trabajadoras».

En resumen, la Comunidad de Madrid se ha erigido como una región solidaria que busca una financiación justa, al tiempo que **apuesta por una política fiscal de *reducción de impuestos* que, paradójicamente, le ha permitido incrementar la recaudación y mejorar los servicios públicos. Este modelo es presentado como una alternativa a la política fiscal confiscatoria del Gobierno central, a quien el consejero madrileño ha instado a adoptar un enfoque más equilibrado y beneficioso para todos los españoles.