El abogado de los padres del soldado muerto en Cerro Muriano pedirá más diligencias

La noticia del trágico accidente ocurrido en la base de Cerro Muriano, que cobró la vida de dos soldados españoles, ha conmocionado a la nación y ha puesto en entredicho la seguridad de las prácticas militares. Como periodista de alto nivel, con un profundo conocimiento del sector empresarial y fluidez en el idioma español, me propongo analizar en detalle los acontecimientos que rodearon este lamentable suceso.

Negligencia y Falta de Organización en la Base Militar

La investigación llevada a cabo por el Juzgado Togado Central Número Dos ha revelado una grave negligencia y falta de organización en la planificación y ejecución del ejercicio que culminó con la muerte de los soldados Carlos León Rico y Miguel Ángel Jiménez Andújar. Según el auto, el capitán Zúñiga, responsable de la planificación, optó por adelantar la práctica de cruce táctico de río sin tener en cuenta las condiciones meteorológicas extremas ni la insuficiencia de medidas de seguridad en el pantano de Casa Mata.

El sargento Castroviejo, encargado de la instalación de la cuerda dinámica que atravesaba el pantano, advirtió de la poca idoneidad de esta práctica para los soldados del programa básico de instrucción, pero aun así cumplió con las órdenes del capitán. Durante el ejercicio, los soldados se vieron superados por la situación, con síntomas de hipotermia y una sensación de pánico y desesperación, lo que llevó a que la cuerda se hundiera y no cumpliera su función de asistencia.

Responsabilidad de los Mandos Militares

El auto del juzgado también señala la falta de supervisión por parte de los mandos superiores. El teniente coronel Zanfaño, jefe de plana del regimiento, no valoró las condiciones de ejecución ni supervisó la actividad de cruce táctico de río. Por su parte, el comandante Velasco se limitó a examinar la documentación sin pedir explicaciones sobre la ejecución de los ejercicios, mientras que el coronel Navarro tampoco solicitó información sobre los ejercicios planificados.

Estas deficiencias en la cadena de mando han sido identificadas como una de las principales causas de la tragedia. Los altos mandos militares deben asumir su responsabilidad en el control y supervisión de las actividades de entrenamiento, con el fin de garantizar la seguridad de los soldados y evitar que sucesos similares puedan volver a ocurrir en el futuro.

Consecuencias y Futuro del Ejército Español

La familia del soldado Carlos León Rico ha anunciado que recurrirá el auto en busca de nuevas diligencias y exigirá una investigación a fondo de la base de Cerro Muriano, con el objetivo de poner en evidencia que este tipo de accidentes no son hechos aislados en el Ejército de Tierra.

Los recortes presupuestarios en el Ministerio de Defensa, sumados a la falta de cuidado y supervisión por parte de los oficiales y jefes, han contribuido a crear un entorno en el que la seguridad de los soldados parece ser una prioridad secundaria. Esta tragedia ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad y la implementación de medidas correctivas que garanticen que los soldados españoles cuenten con las condiciones adecuadas para llevar a cabo su entrenamiento.

En resumen, el accidente ocurrido en la base de Cerro Muriano ha dejado al descubierto graves deficiencias en la organización y ejecución de las actividades de instrucción militar, lo que ha costado la vida de dos jóvenes soldados. Esta tragedia debe servir como un llamado de atención para las autoridades militares, quienes tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad de los miembros de las Fuerzas Armadas y preservar la confianza de la ciudadanía en el Ejército Español.