La presidenta de los rectores afirma que el porcentaje de aprobados «demuestra que el sistema funciona»

La Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) es un examen crucial que determina el ingreso de los estudiantes a la universidad en España. En los últimos años, se ha observado un alto porcentaje de aprobados en esta prueba, lo que ha generado diversas reacciones y debate en torno a la eficacia del sistema educativo.

La presidenta de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y rectora de la Universitat Jaume I, Eva Alcón Soler, ha afirmado que este alto porcentaje de aprobados demuestra que el sistema funciona. Según ella, el estudiantado ha pasado las pruebas realizadas en sus centros educativos, y quienes no lo lograron, no llegan a las pruebas de acceso a la universidad. Por lo tanto, es lógico que haya un porcentaje muy alto de aptos en las pruebas de acceso a la educación superior.

La EBAU: Un Reflejo del Aprendizaje y Preparación del Estudiantado

En el curso 2023-2024, el porcentaje de alumnos aprobados en las pruebas de la EBAU ha alcanzado un 96,84% en toda España, lo que representa un aumento de casi 0,5 puntos porcentuales respecto al curso pasado, cuando aprobó el 96,38% de los estudiantes. Esta tendencia de incremento en el porcentaje de aprobados se ha mantenido en los últimos años, con un 96,38% de aprobados en el curso 2022-2023 y un 96,06% en el 2021-2022.

Según Alcón Soler, este alto porcentaje de aprobados en la EBAU demuestra que el sistema educativo funciona, ya que el profesorado ha preparado adecuadamente al estudiantado como parte del proceso de aprendizaje, impartiendo conocimiento y evaluando su desempeño.

La EBAU: Un Mecanismo de Ordenación y Acceso a la Universidad

La presidenta de CRUE ha explicado que las pruebas de acceso a la universidad tienen como finalidad ordenar al estudiantado para aquellas titulaciones donde hay más demanda que oferta. Por lo tanto, este examen de acceso cumple con su objetivo de organizar el ingreso a la educación superior.

En este sentido, Alcón Soler ha señalado que cualquier modificación en las pruebas de acceso a la universidad debe realizarse de manera integral, abarcando cambios en el Bachillerato, la evaluación y sus criterios. De lo contrario, advierte que se corre el riesgo de cometer errores en la implementación de dichas modificaciones.

En resumen, los altos porcentajes de aprobados en la EBAU demuestran que el sistema educativo español funciona adecuadamente, ya que el profesorado ha preparado correctamente al estudiantado y las pruebas de acceso a la universidad cumplen su propósito de ordenar el ingreso a la educación superior. Sin embargo, cualquier cambio en este sistema debe ser abordado de manera integral y holística, para evitar posibles errores en su implementación.