Dos altos directivos, la incomodidad de Pablo Motos, varios hilos de Twitter y algún comentario mordaz en el congreso. No ha sido poco el costo comunicacional de la llegada de David Broncano y ‘La Resistencia’ a RTVE, pero el costo económico es aún mayor, y será algo que tendrá que explicar el Gobierno en los próximos días cuando se ponga lupa sobre el acuerdo. Pero desde un principio hay algo evidente: El programa será más costoso en el canal estatal de lo que era en Movistar+.
El acuerdo que han firmado gracias al «voto de calidad» de la presidenta interina del canal, Concepción Cascajosa, asciende a los 28 millones de euros por los dos años que pasará el programa de Broncano en RTVE, al menos inicialmente. Se espera en ese tiempo produzca unos 155 episodios, que se emitirán como contraprogramación a ‘El Hormiguero’ de Pablo Motos. A 14 millones por año, esto quiere decir que el canal del estado pagará 4 millones más al año de lo que Movistar+ pagaba por el programa, un monto nada despreciable si se toma en cuenta que el presentador no pasaba por su mejor momento en cuanto a audiencias.
Aun así, es importante seguir de cerca esta adquisición del ente público. La apuesta en que en dos años el programa genere suficiente audiencia para justificar el coste, y que mejore los datos de RTVE Play, la opción en línea gratuita de la plataforma. Aun así, es un punto que será señalado por los próximos dos años como un gasto absurdo, como ya lo hizo ayer Alberto Núñez Feijóo en el congreso, y es fácil imaginar que los partidos de oposición empiecen a llevar una lista de comentarios controvertidos del presentador y aunque el propio Broncano no le dará demasiada importancia puede ser una conversación incómoda para el Gobierno.
EL ENEMIGO: PABLO MOTOS
No es un secreto que el motivo del fichaje del presentador de ‘La Resistencia’ es competir con Pablo Motos. El presentador de ‘El Hormiguero’ tiene tiempo siendo uno de los críticos más mediáticos del Gobierno de Pedro Sánchez, y la realidad es que buscar un contrapeso televisivo es una de las pocas herramientas que tiene el PSOE para enfrentarlo. El propio Motos, que ha hecho todo para evitar hablar de la situación, ha recordado que le parece correcto que haya competencia, pero no ha querido agregar otro comentario.
Por su lado, el canal estatal no ha hecho más comentarios, dejando que la situación avance normalmente. Previsiblemente, la nueva versión del formato empezará a transmitirse en septiembre, y aunque lo esperado es que Broncano y el canal intenten mantenerlo lo más cercano posible al actual, después de todo esta probablemente sea la mejor manera de competir con el rival de Antena 3.
Es además una victoria clave para El Terrat, la productora de Andreu Buenafuente. No solo consigue que uno de sus programas más conocidos tenga una ventana todavía más grande, sobre todo fuera del territorio español, donde TVE es mucho más accesible que las transmisiones a través de Movistar+, que básicamente encerraban a Broncano y su formato dentro del territorio español.
EL FUTURO INMEDIATO DE BRONCANO
En cualquier caso, Broncano de momento tiene motivos para celebrar. No solo por su aumento de sueldo, sino por qué ha demostrado que sigue siendo clave dentro del panorama televisivo, al punto que su contratación en RTVE ha sido un asunto de estado en año electoral. Al mismo tiempo, su nueva posición le obliga a lidiar con un escrutinio distinto al de la televisión privada, de hecho será llamativo ver si el canal le permite llegar a los extremos donde no llegaba en Movistar+.
«Le quiero dar dos noticias, una buena y una mala. La buena es que ha conseguido usted, esta mañana, gastar 14 millones de euros de dinero público cada año fichando un programa en Televisión Española para mejorar su vanidad televisiva. Y la segunda, la mala, la mala, es que a la gente no le interesa la propaganda», ha afirmado ayer en el congreso el líder del PP. Es un número que es fácil pensar que se le recordará al Gobierno, y a Broncano, cada vez que haga un chiste que desde la oposición consideren puede servir como arma arrojadiza.
No fue el único meimbro del PP que ha comentado el fichaje. Isabel Díaz Ayuso tampoco se mostró demasiado contenta, «qué pensaran los profesionales de RTVE que tienen que ver cómo se realizan esas contrataciones millonarias que un ente que no se lo puede permitir», sentenció sobre el fichaje.
Por ello originalmente pedía tres años de contrato. Sabe que si la audiencia no lo acompaña en dos años puede estar buscando trabajo de nuevo, no es la mejor posición para afrontar como profesional. Debe conseguir un 7,5% de audiencia para asegurarse el puesto y compitiendo con un Pablo Motos que hará los posibles para dejarlo por fuera, aunque no lo diga en voz alta. No es una situación tan cómoda como la que tenía en Movistar, aunque tampoco es una mala oportunidad para el presentador.
